Entiendo que los visitantes de esta página son gente de mucha paciencia, porque se pasan los días y no aparece nada nuevo. La razón es muy sencilla: hay un pecado capital llamado pereza que ataca especialmente a la hora de ponser a escribir en este espacio. Puede haber influido algo el que no se vean avanzar las obras de la iglesia. En realidad está todo a punto y la empresa está deseosa de comenzar. Han suregido dos pequeños problemas. El primero una inioportuna arqueta de Unión Fenosa en pleno solar, a la altura de donde van las viviendas y dependencias parroquiales. El otro problemilla es la disyuntiva, a la hora de cimentar, entre el sistema de pilotaje o poner una losa. Las dos alternativas figuran en el contrato y el reciente sondeo se ha realizado para ayudar a decidir. Confiemos en que al incicio dela próxima semana empiecen ya de una vez las máquinas a escarbar.
Por lo demás, la vida parroquial sigue. Esta misma tarde, Dios mediante, celebraremos una boda de nuestra parroquia (aunque con iglesia prestada). Deseamos a Francisco José y a Zaira que su compromiso de amor colme sus vidas.
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