Saludo 13 de agosto de 2008

He de reconocer que siempre me acuerdo del abandono en que tengo esta página, pero me falta voluntad para escribir algo. Pido disculpas. No obstante, el tiempo se pasa sin sentir, y no pensé que fueran tantos los días de ausencia. La página está como las obras de la Iglesia, parada. A los pequeños problemas burocráticos hay que añadir que estamos en agosto o, mejor dicho, que en agosto no está mucha gente. Aquí, como sucede con los malos estudiantes, parece que va a quedar todo para septiembre. No se si es esta la razón principal de no escribir aqui durante muchos días, pero creo que sí pesa bastante. De todas maneras, la esperanza es lo último que se pierde.