4 de noviembre de 2008

Aparentemente puede dar la impresión de que todo sigue igual. Las mismas máquinas, los mismos camiones... Pero estamos a punto de comenzar una nueva fase en la que comenzará a hacerse presente el hormigón. Muros laterales, columnas, gran losa que sustentará el piso de la iglesia. "Sobre esta piedra edificaré mi Iglesia", dijo Jesús a Pedro. Aquí no será sobre piedra, sino sobre hormigón armado. No obstante, aunque invisible, hay una piedra fundamental, como la "piedra angular". Es Jesucristo. No podemos quedarnos solamente en la obra material, en la obra externa. Solamente Jesús, el hijo de Dios vive, el resucitado de entre los muertos es quien da sentido a esta magna obra. Tan importante como la solidez de los materiales empleados es la solidez de la fe que ha de sustentar a la nueva comindad parroquial.