Qué bien que el párroco deje utilizar la iglesia para actividades culturales. Yo al menos soy partidario de ello. El "Concierto" de hoy , realizado por el alumnado del Conservatorio de Ponferrada bajo la fenomenal batuta de Salvador Ferrer, fue una muestra cultural, por lo tanto estuvo adecuada para nuestra Iglesia. Con la música, de todos es sabido, se fortalecen los valores del esfuerzo, el compañerismo, la unión, el respeto, el compartir, el buen hacer,... , muchos de ellos escasos en el mundo actual que vivimos.Y más si estos son adquiridos por jóvenes, Pues apoyémosla todo lo que se pueda, sigamos dándoles la oportunidad para que los reafirmen. Además, en la iglesia, cantar es rezar dos veces, y si se acompaña con instrumentos, aún más se dignifica este rezo que tanto escasea entre los jóvenes. Hoy estos jóvenes intérpretes bercianos lo hicieron muy bien; fue el segundo concierto en esta iglesia durante este año, y una vez más, demostraron su enorme valía y profesionalidad. Fueron merecedores del mejor aplauso. El mismo Cristo que estaba presente en la cruz, así como el el Sacramento dentro del Sagrario -testigo el pábilo de la vela que no fue retirada- seguro que aplaudió el estupendo trabajo de estos estudiantes. Porque lo hicieron bien y fueron siempre respetuosos con el lugar como saben hacerlo siempre.Esta vez, si se cumplio lo de "Dios te lo pague" - digo yo. Por eso, animo al párroco, para que siga permitiendo este tipo de actividades. Aunque bien es verdad, que se debiera corresponderse con algún donativo de apoyo a la iglesia. Esto es un fallo que se perdona pero que debe de entender.
Una iglesia no es un teatro, pero todo loque sea digno cabe dentro de ella. Confiemos en que esta tarde la música agrade al Señor. 
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Qué bien que el párroco deje utilizar la iglesia para actividades culturales. Yo al menos soy partidario de ello.
El "Concierto" de hoy , realizado por el alumnado del Conservatorio de Ponferrada bajo la fenomenal batuta de Salvador Ferrer, fue una muestra cultural, por lo tanto estuvo adecuada para nuestra Iglesia.
Con la música, de todos es sabido, se fortalecen los valores del esfuerzo, el compañerismo, la unión, el respeto, el compartir, el buen hacer,... , muchos de ellos escasos en el mundo actual que vivimos.Y más si estos son adquiridos por jóvenes, Pues apoyémosla todo lo que se pueda, sigamos dándoles la oportunidad para que los reafirmen. Además, en la iglesia, cantar es rezar dos veces, y si se acompaña con instrumentos, aún más se dignifica este rezo que tanto escasea entre los jóvenes.
Hoy estos jóvenes intérpretes bercianos lo hicieron muy bien; fue el segundo concierto en esta iglesia durante este año, y una vez más, demostraron su enorme valía y profesionalidad. Fueron merecedores del mejor aplauso. El mismo Cristo que estaba presente en la cruz, así como el el Sacramento dentro del Sagrario -testigo el pábilo de la vela que no fue retirada- seguro que aplaudió el estupendo trabajo de estos estudiantes. Porque lo hicieron bien y fueron siempre respetuosos con el lugar como saben hacerlo siempre.Esta vez, si se cumplio lo de "Dios te lo pague" - digo yo.
Por eso, animo al párroco, para que siga permitiendo este tipo de actividades. Aunque bien es verdad, que se debiera corresponderse con algún donativo de apoyo a la iglesia. Esto es un fallo que se perdona pero que debe de entender.
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