9 de diciembre de 2011

Hace un mes que no se ha hecho ninguna modificación en esta página. Demasada paciencia tienen los inernautas que siguen entrando aquí cada día. Al tener contacto directo con los fieles ya se hace menos necesario este contacto virtual, a través de la red. No obstante, comprendo que este es un ámbito que no se debería descuidar. Noticias no faltan, aunque todo transcurre con normalidad. El ambiente es bueno, lo que no quiere decir que no haya aspectos mejorables. Que nadie tome a mal si hacenos una invitación a ser más puntuales a la hora de la misa del domingo. Más vale tarde que nunca, pero hasta las doce y diez no para de entrar gente. Ahora que estamos en invierno, por favor, cuando entren cierren la puerta. Si está abierta la puerta, el calor se va inmediatamente de la iglesia, como si fuera ateo. A la entrada de la iglesia aparecen las cuentas de todo un año referidas a ingresos por colectas y gastos por luz y calefacción. Todavía seguimos en números rojos. No se trata de forzar a nadie a dar más, pues entendemos que la crisis está presente, pero sí a no cansarse. Entre todos se puede salir adelante sin demasiado esfuerzo. Hay muchos niños de catequesis, pero no tiene sentido que estén preparándose para recibir la Eucaristía y no vengan a misa. Los padres tienen que ser más consecuentes... Ciertamente hay muchas cosas positivas, pero no podemos dormirnos en los laureles.