miércoles, 22 de octubre de 2008

22 de octubre de 2008

Para quienes llevamos tanto tiempo esperando el comienzo de las obras, el ver ahora todo en marcha parece casi un sueño. No es que estuviéramos desmoralizados, aunque nuestra moral haya sido puesta a prueba, pero era otro estado de ánimo muy diferente. Digamos que ahora estamos en una fase ilusionante, pero mucho más allá de la esperanza de ver un edificio hermoso y acogedor, soñamos con una comunidad cristiana acorde con él, en la que los niños, los jóvenes, sus familias, le den auténtica vida.

1 comentario:

Amador dijo...

Sí, muy cierto, pero el aspecto material habrá que tenerlo también muy vigilado, para que la empresa constructora cumpla con el tiempo, y la calidad concertadas y necesarias en esta obra tan singular en un entorno tan interesante de Ponferrada.
Así pues, ánimo y un empujón al Consejo Parroquial comprometidos e ilusionados desde un principio con esta labor, pero que será necesario que se llene con más componentes que apoyen esta forma organizativa de "la parroquia". ¡Venga! a unir fuerzas.